como un cuarto que se llena de agua
con lentitud de inquisidor
el sol de octubre corta jirones de mi ser
yo sola me preparo las trampas
la satisfacción de la piel bien cosida
he esperado con paciencia
a que el desastre ocurriera
y ocurrió
soy un cuervo al que le han sacado los ojos
picoteo de mí misma sin piedad
En "Sombras, incendios y desvanes. Diecisiete poetas rumanas (1961-1980)"
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