18.3.25

Nathalie Léger. Solo hay un lugar...

Cuando estoy charlando, a menudo también me dan ganas de hacerte un lugar. Es como una fidelidad, pero termino aprendiendo que esa fidelidad debería guardarse en secreto (secretas tus sorpresas, tus vacilaciones, las aristas de tu pensamiento, tu valor y tu dulzura, lo mucho que te gustaba el esquí y la astrofísica, lo mucho que querías a tus hijos, tu manera de conversar, de emocionarte, de dejarte llevar, de quedarte callado, de dormirte, de reír, las notas de tu risa, tu manera de tocar la punta de mis dedos con la punta de los tuyos, de mostrarte intimidado, desdichado, torpe, soberbio, tu manera de amar, de amar, no termino más). Solo hay un lugar donde se pueden reunir esas cosas, la escritura: única materia de este testimonio, a la vez tierra, cajón y cuerpo.


De "En busca del cielo"
    

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