24.7.24

Concha Méndez. Ven, tristeza...

Ven, tristeza, mi hermana, que de mí misma vienes
engendrada de siglos, o tal vez de milenios,
ven a abrigar mis horas, no se sientan desnudas;
ven a esculpir en bronce la esencia de mis sueños!
   
Contigo veo el mundo, mejor, más verdadero;
tú no pones cristales a este sol de la vida 
para que al reflejarse nos parezca el reflejo
una verdad solemne, siendo vana o suicida.


De "Lluvias enlazadas"
En "Las sinsombrero y un nuevo 27"
    

No hay comentarios: