15.11.25

Ana Blandiana. Ojalá

Ojalá nos hubiéramos conocido
antes de nacer,
y tal vez fuera así,
pero lo hemos olvidado.
Recordar de una vida a otra
los dos sabemos que es pecado.
  
Pero quizá entonces hubiéramos sabido 
qué hacer
con lo que no cabe
en nuestras vidas y se derrama
como una lágrima bajo el párpado. 
  
Si hubiésemos conseguido cruzar juntos
ese primer umbral,
sería la prueba de que no es absurdo esperar,
de que podríamos hacerlo una vez más,
  
de que entre la vida y la muerte
nada se detiene ni se separa
para poder volver
al otro lado.


De "Se hace silencio en mí"
    

No hay comentarios: