"Marcelle Drouffe era una muchachita soñadora y precoz: desde la edad de diez meses había dado muestras de una extraordinaria sensibilidad. "Cuando te hacías daño no llorabas de dolor -le dijo mas tarde su madre-, sino porque te sentías traicionada por el mundo."
De "Cuando predomina lo espiritual"
No hay comentarios:
Publicar un comentario