14.8.19

Julia Hartwig. Regreso al hogar de la niñez

En medio del oscuro silencio de los pinos, el grito de los jovencísimos abedules llamándose a voces.
Todo está como entonces. Nada está como entonces.
Háblame. Dios de mi niñez. Háblame, angustia, inocente!
No comprender nada. Siempre de otro modo, desde el primer grito hasta el último suspiro.
Y, no obstante, también eso fue vivir. Y los instantes felices salen a mi encuentro desde el pasado, cual vírgenes con un candil en la mano.
 
 
   de "Hacer un alto"
    en el libro "Dualidad"
    

No hay comentarios: