GERTRUDE: A veces me despierto en mitad de la noche con una sensación de soledad rarísima... Es como si me hubiera caído de un acantilado y hubiera aterrizado a miles de kilómetros de todo lo que era cercano a mí, a mi corazón... Hasta mis propias penas y aflicciones me resultan ajenas. Nada me pertenece, es como si una sombra hubiera pasado por sobre toda mi vida..., oscureciéndola. Entonces trato de decir mi nombre en voz alta, una vez y otra vez, pero no consigo que las cosas vuelvan a su lugar.
De "Verano en la glorieta"
la obra de teatro incluida en "Juego de damas"
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